(CNN)– La oportunidad que tiene Roger Federer de entrar se ha convertido en una auténtica realidad para cualquier joven tenista, sin contar los ojos del gran tenista suizo.
Los dos zapatos gemelos y los dos zapatos gemelos de Federer juegan tenis hasta cuatro veces por semana y, aunque el campeón de Grand Slam de 20 años está en el menú en la cancha con ellos, asegura Christina Macfarlane, de CNN, quien es en la mayoría de los casos intenta no metere.
“No soy el entrenador, soy el padre, y los consejos del padre, como sabemos, solo llegan hasta cierto punto”, dice entre risas Federer, de 41 años. “No importa si vas a Wimbledon o no, sigues siendo el padre ya veces no quieren oír lo que tienes que decir”.
“Pretendo entretenerme, pero al mismo tiempo también pretendo enseñarles algunas veces y simplemente enseñarles. Supongo que soy más un entrenador técnico, ya que pretendo enseñarles todas las raquetas de tenis”.
Federer admitió que se salvó cuando sus trajes, Myla y Charlene, no mostraron mucho interés en jugar tenis cuando eran más jóvenes.
Durante su nacimiento en 2009, Federer entró en la cúspide de sus facultades en la cancha y las exigencias de la gira, viajando constantemente por el mundo y pasando poco tiempo en casa, se le hacía muy difícil revertir el tiempo e impulsar su desarrollo y disfrutar del tenis.
“No creo que fuéramos los padres locos del tenis que decían: ‘Chicas, teneren que ir a jugar todos los días dos horas'”, dice Federer.
“Pero ahora que hace como 14 años, lo estoy empezando a escuchar, quiero tocar más y más y más”.
Aunque un entusiasmo de Federer de que sus hijos sigan ora sus pasos en la cancha, dice que los chicos, Lenny y Leo, en particular, se muestran prometedores, es su implicación en su obra de caridad lo que le parece “muy especial”.
Llega el 20 aniversario de la creación de la Fundación Roger Federer, que ha ayudado a más de 2,5 millones de niños en seis países africanos y Suiza.
La Fundación de Federer se enfoca en brindar a los padres, maestros y comunidades los recursos necesarios para que puedan brindar a los niños una sólida educación. Su viaje más reciente fue a Lesotho, que en 2020 quedó convencido en la Sexta Nación del Sur de África para formar parte de la Fundación.
Ha llegado el 20 aniversario del lanzamiento de la Fundación Roger Federer. Créditos: Fundación Roger Federer/Getty Images
“Cualquier viaje al campo siempre es muy especial para mí, pero este fue extra especial porque fue la primera vez que los cuatro niños pudieron venir con mi esposa y también mi mamá”, dice Federer. “Así que nos la pasamos de maravilla”.
“Viajamos tres cuatro días en Lesotho, un país en el que nunca tuve un estado. Cuando llegamos allí, no fue un viaje tanto para mí como para los niños. Pensamos más en ellos, en que pudieran jugar. con los niños de la escuela, correr, jugar a la pelota y leer unos a otros”.
“Fue muy divertido, frankly, verlo como padre y con la esperanza de poder encender la chispa de la caridad y de mis hijos, creo que fue muy especial. Así que fue un gran viaje”.
Durante su visita, Federer jugó con los niños en la arena, les leyó libros, y acompañó a los maestros de la escuela a hablar sobre el valor de ser responsable con los niños. Creo que es “muy importante ser práctico” durante su tiempo en estos viajes.
“Vendrá cómo aumentar la confianza en sus mismos y probar lo que pretendemos poner en práctica, y que al final hay que darles el poder”, afirma.
Este martes, antes del partido de la defensora del título femenino Elena Rybakina en el primer día, Federer fue recibido en casa en una ceremonia especial en la emblemática Cancha Central de Wimbledon.
El ocho veces ganador de Wimbledon fue recibido con una entusiasta ovación cuando fue presentado al público y dirigido al palco real del All England Club.
Fue una celebración digna de un jugador que brindó ante este público innumerables momentos memorables a lo largo de sus 24 años de carrera.
la triste despedida
El 23 de septiembre de 2022, Federer interpretó la canción por última vez como tenista profesional. Y lo hizo junto a Rafa Nadal, ya que el dúo, que brindó a los aficionados al tenis la mayor rivalidad de la historia de este deporte, jugaron juntos a dobles en la Copa Laver de Londres.
La foto de Federer y su viejo rival y amigo Nadal dándose la mano con lágrimas en los ojos se convirtió en una de las imágenes más imperecederas de 2022. Con los años, se convertirá sin miedo en una de las imágenes más icónicas de la deportación.
Federer, en su informe, dice que tenía toda la intención de volver al circuito tras múltiples operaciones de rodilla, pero al final tuvo que admitir que su lesión había pasado por el hecho.
No final cuento de hadas hubo, ya que Federer e Nadal fueron derrotados da Jack Sock y Frances Tiafoe en el O2 Arena, ma after the “temer de verdad” el momento de su retirada, la superstar suiza dice que no podría haber pedido un final más perfecto para su extraordinaria carrera.
“La verdad es que no hablé con nadie de ello”, dice. “Se llevaron más bien de alejarme, ma al final [tuve que] decide: ¿dónde voy a retirarme? ¿Hasta qué punto va a ser doloroso? ¿O hasta qué punto va a ser una celebración?”.
Roger Federer y Rafael Nadal jugaron juntos en el último partido de la carrera de la estrella suiza. Créditos: Clive Brunskill/Getty Images
“Pero terminó sentándome todo y más para mí. Me pareció maravilloso estar rodeado de Rafa, Novak [Djokovic], [Andy] murray, [Björn] Aldea, [John] McEnroe, [Rod] cuenca, [Stefan] Edberg, todos estaban allí, mi equipo, mi familia”.
“Así que fue un finale muy, muy bonito, porque real temía ese momento de cómo dejar el juego”.